Las rojiblancas se queman en el simulacro de Burgos ante el Atlético de Madrid
- Rubén Gargoi
- 20 ago 2017
- 2 Min. de lectura
Foto: Athletic Club
El Athletic se vio arrollado ante un Atlético de Madrid que no dio tregua. Las de Joseba Agirre, en su amistoso más complicado en lo que va de pretemporada, salieron con la moral tocada. El equipo se enfrentaba a un rival que aspira a lo más alto de la clasificación. Un rival que, si las cosas van bien, será competencia directa. Sin duda, el choque amistoso entre leonas y colchoneras, iba a servir para medir fuerzas. Una prueba de fuego de la que el Athletic salió quemado. El conjunto bilbaíno sucumbió ante el bloque madrileño y terminó cayendo por un contundente 1-5.
El pasado año en La Liga Iberdrola el cuadro dirigido por Agirre consiguió 1 punto de los 6 posibles contra las colchoneras. En casa, el conjunto bilbaíno cedió un 1-2. En la vuelta, en cambio, las leonas pudieron rascar un punto contra un equipo que disfrutaba de un gran momento y no se podía permitir errores. No obstante, en el reciente amisto, el Athletic no demostró ser rival para un Atlético de Madrid que viene a más. De principio a fin mandaron en el juego.
Las instalaciones municipales de Pallafría fueron el escenario en el que el Atlético de Madrid féminas comenzó adelantándose en el minuto 26 gracias al gol de Corredera. A pesar del gol encajado antes de la media hora, el Athletic supo reaccionar. 9 minutos más tarde de recibir el primer golpe, Ainhoa V. Moraza puso las tablas en el electrónico. Sin embargo, el combinado dirigido por Ángel Villacampa dio un puñetazo en la mesa y demostró su poder con un gol antes del descaso.
En la segunda mitad, las leonas buscaron el empate, pero fue en vano. En el minuto 76 el último fichaje del conjunto colchonero, Ludmila Da Silva, dejó su sello con un gol que encarrilaba el encuentro. El técnico de Ortuella no consiguió que sus jugadoras pudieran volver a sorprender al Atlético de Madrdid en lo que restó de encuentro. Las madrileñas, con el marcador a favor quisieron marcar territorio de cara a la liga y convirtieron dos tantos más. Sosa en el 80 y Carla en el 86 cerraron un marcador muy abultado.
El Athletic cierra así una semana muy dura. Siete días de mucho ritmo, trabajo, esfuerzo y muy poco descanso. Lo más positivo del viaje a Burgos fue sin duda, que se trató de un simulacro. Un golpe moral sin efectos secundarios en el casillero de puntos. Un tropiezo que si se analiza y se entiende bien puede servir para aprender. El cuerpo técnico y las jugadoras tendrán dos semanas para corregir todos los errores y encarar una liga que seguro será muy complicada,
Comentarios