El sueño de la selección española se hace añicos en la final ante Japón
- Rubén Gargoi
- 24 ago 2018
- 2 Min. de lectura

Foto: Twitter @SeFutbolFem
La selección española, que consiguió clasificarse para la final del Mundial sub'20 disputado en tierras francesas sin conceder una derrota, cayó ante Japón cuando ya acariciaba el cielo. El combinado dirigido por Pedro López, que ya derrotó al conjunto nipón en la fase de grupos con un único gol de Carmen Menayo, no pudo esta vez con las asiáticas y terminó su magnífica andadura en la Copa del Mundo en un mar de lágrimas.
ESPAÑA 1-3 JAPÓN
Las leonas del Athletic Club, Damaris Egurrola y Maite Oroz volvieron a partir como titulares, mientras que Lucía G. Córdoba, con molestias musculares, y Andrea Sierra no disputaron ningún minuto.
El cuadro español comenzó dominando, sin miedo y con descaro. La selección desplegó su mejor fútbol para atrincherar en la primera mitad al conjunto japonés en su propio campo. No obstante, las niponas supieron cómo guardar su portería y esperaron su ocasión. Cuando más cerca parecía el gol de España, Hinata Miyazawa sorprendió a Cata Coll con un tremendo derechazo desde fuera del área para poner el 0-1 en el marcador cerca del descanso. Tras el gol la selección quedó algo aturdida, aunque el resultado no se volvió a mover en la primera mitad.
En el segundo acto, las de Pedro López no consiguieron reencontrar esa fluidez en su fútbol de la que hicieron gala en los primeros 45 minutos. Japón se mostró más cómodo y consiguió trasladar esa sensación al electrónico con los goles de Saori Takarada y Fuka Naganao que sentenciaban el encuentro y por ende el Mundial.
A pesar del resultado adverso, con un 0-3 en contra en el luminoso, la selección española no bajó los brazos y continuó apretando los dientes. Con jugadas de posesión, combinativas, con balones largos, a balón parado o mediante disparos lejanos. La selección lo intentó de mil maneras ante una bien plantada selección japonesa. En uno de esos intentos, Candela Andújar consiguió superar a la guardameta nipona Hannah Stambaughy reducir distancias. Ese tanto, dio vida a las españolas que no perdieron la esperanza y continuaron soñando, hasta que en el minuto 93, no hubo tiempo para más.
Al término del encuentro, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se había desplazado hasta Vannes (Francia) para presenciar el encuentro, bajó al vestuario para felicitar y apoyar a unas jugadoras abatidas. Y es que, la hazaña de la selección ha mantenido en vilo a medio país y ha contribuido enormemente que el fútbol femenino se conozca y que los medios de comunicación hablen de él. Sin duda, la derrota de la selección española es una victoria para el #fútfem en el país.
Comments